Tendencias / Febrero 7, 2017
Chillennials: conoce al millennial “a la chilena”
De tantas generaciones que han pasado, la que más da qué hablar ahora son los millennials. Todos los nacidos entre 1981 y 1995, que vivieron una prosperidad económica antes de la crisis durante el cambio de milenio son parte de esta generación llena de estereotipos y traumas del pasado.
La velocidad de la vida y los avances tecnológicos han hecho de esta generación algo muy especial, por lo general se los evalúa como jóvenes que no valoran la familia ni el trabajo típico, prefieren viajar y ahorrar lo más posible para seguir viajando. También son personas que se manejan “en otro idioma” frente al mundo, casi todo pasa rápidamente y en digital, pero ellos tienen todo esto interiorizado buscando sacarle provecho a lo que el mundo tiene para ellos.
Por estas, y muchas otras cualidades, no es raro pensar que son uno de los segmentos más atractivos para la publicidad digital y también para los medios, ya que representan un 30% de la población en Latinoamérica, y ya en 2025 representarán un 75% de la fuerza laboral mundial.
A partir de dos estudios GfK Adimark nos muestra que el Chilennial está muy lejos de parecerse a su estereotipo global. Mediante varias encuestas se llegaron a varias conclusiones sobre el millennial “a la chilena”, que difiere bastante al jóven prototípico de cambio de milenio.
Acá iremos desmitificando lo que se ha dicho de los Chilennials para poder comprenderlos mejor y saber a qué audiencia nos estamos enfrentando realmente:
Mito 1: El mundo gira en torno a ellos
Se dice que los millennials sólo piensan en ellos mismo y que gradualmente la familia importa cada vez menos, pero en Chile esto es completamente distinto. De los millennials encuestados, sólo un 15% viven con su pareja (sin hijos) o solos. Un 62% de ellos viven con su pareja y sus hijos como una gran familia.
Además de esto existe otro segmento que se le llaman canguros, constan del 23% restante de los millennials. Son aquellos jóvenes que viven aún con su familia, y contrario a lo que se cree, no es por conveniencia y ahorro de dinero para viajes. Un 70% de los canguros son C3D, y se descubrió que la gran mayoría son primera generación de profesionales en su hogar, queriendo aportar a su hogar y mostrando agradecimiento a sus padres con esto.
Aunque la conformación de la familia ha cambiado bastante, el 60% de los chilennials creen que la base de la sociedad chilena es la familia, demostrando que aún es fuerte el compromiso con este vínculo, y que lo más importante para ellos no es “yo, y después, yo”. Al igual que el resto de las personas su segundo criterio para escoger donde vivir es qué tan lejos o cerca se está de su familia,
Mito 2: La tecnología los hace más libres
Es verdad que ahora los millennials consideran la tecnología un bien básico. Más del 80% de ellos tiene un smartphone y el 77% de los encuestados tienen internet en sus hogares. El único problema de tener tanta tecnología disponible es que esto no los ha hecho libres, ya que un 79% de los chilennials se siente esclavo de la tecnología con la que está expuesto todos los días.
Mito 3: Quieren ser sus propios jefes
Los horarios flexibles en los trabajos, y la facilidad con la que podemos conectarnos en distintos lugares ha hecho que los límites entre la vida privada y el trabajo desaparezca. El 86% de los chilennials siente que no puede separar estas dos esferas, y se ha comenzado a revalorar el trabajo “tradicional”.
Ahora sólo el 37% de los chilennials le gustaría ser su propio jefe. Los milennials chilenos entienden el gran compromiso que carga ser su propio jefe, por lo que ahora se valora más estar un tiempo en familia, y trabajar con horarios tradicionales como se hacía antes para no volverse loco y tan inmerso en el trabajo 24/7.
Mito 4: Están siempre felices, viven para pasarlo bien
Si bien se cree que ahora están todas las opciones para ser feliz, el chilennial no cree esto en absoluto. Sólo un 24% de los chilennials vive la vida que siempre soñó, mientras que más de un 30% de los adultos no chilennials afirman esto.
Las enormes posibilidades que existen ahora gracias al manejo de información y la tecnología también trae consigo el gran y famoso estrés. La búsqueda de la felicidad tiene muchos costos y ha hecho de esta generación una generación ansiosa y muy estresada con cada decisión que toma.
El Chilennial no es aquél millennial con dinero, que sólo le interesa viajar, que viven con sus padres para ahorrar lo más posible, que no valoran ni sus familias ni sus trabajos, sino todo lo contrario. El millennial “a la chilena” está comprometido con su familia, con su trabajo, y es más consciente de sus posibilidades, intentando de alguna forma dejar de depender tanto de la tecnología.