Tendencias / Octubre 31, 2018
Anuncios pop-up: ¿Los odias o los odias?
Cuando hablamos de anuncios pop-up en general, hablamos de las ventanas externas que se abren cuando estás navegando en un sitio web, utilizando un programa, en menús desplegables, etc. Son esas ventanas que instintivamente relacionamos muchas veces que tienen virus, que aparecen por sorpresa o ya sabemos que simplemente aparecerán.
Pero los más conocidos e intrusivos, son los pop-ups de publicidades online y quizás no existe nadie que no haya sido víctima de esto. Y es que es una gran manera de captar y “sorprender” al consumidor, quizás como publicistas piensan que puede ser una buena estrategia y quizás como consumidores, usuarios normales lejos del papel de publicistas, puede que piensen que es una pésima idea también.
Pero qué dicen los números según IAB y Pagefair:
- 26% de los usuarios de computadores de escritorio usan bloqueadores de anuncios pop-up.
- 15% de los usuarios de dispositivos móviles declaran también usarlos.
- 615 millones de dispositivos usan Adblock
- 11% de la población global bloquea los anuncios de web
¿Funcionan realmente? Por una parte sí, ya que se “obliga” al usuario a verlas aunque sea un par de segundos, en el mejor de los casos puede ser bastante interesante o interactiva como para poder causar el interés del consumidor y así poder lograr el objetivo del anuncio.
Lo que se debe evitar, es generar la desconfianza de que parezca un virus o no tener la posibilidad de cerrar el anuncio cuando el usuario desee, eso podría convertir el anuncio en algo sumamente molesto y por consiguiente una marca molesta.
Recuerdas alguna publicidad pop-up que te haya molestado tanto hasta el punto que hoy día aún la recuerdas? O simplemente utilizas Adblock?